Casa de Uriel en Japón

-Claro, voy a por el desayuno-sonríe y le besa suavemente

*Le devuelve el beso y sonríe*
- Está bien.

Se levanta y vuelve al cabo de unos minutos con una bandeja con las cosas del desayuno.

-Toma, come, mi dulce Kei-sonríe

*Sonríe*
- Todo tiene tan buena pinta como siempre.

-Me inspiras tú-sonríe

*Se ríe*
- Así que es eso.- *Prueba un poco* - También está tan rico como siempre -*sonríe*

-Claro que es por eso-se ríe y empieza a comer

- Seguro que antes también cocinabas así de bien *sigue comiendo*

-Encima de que trato de ser romantico-se ríe

*Se ríe*
- Ya sabes que siempre desbarato tus intentos de ser romántico.

[Creo que soy adicta al kitkat o-o xD]

-Con lo que me cuesta... que soy un demonio...-pone morritos

- Pues lo siento, pero no sabes lo bien que me lo paso llevándote la contraria... *se ríe* Y con esa cara pareces cualquier cosa menos un demonio xD

-Ya sé que te encanta llevarme la contraria-sonríe-Eso de que no parezca un demonio es bueno, ¿no?-se ríe y le besa suavemente

*Le devuelve el beso*
- Sí, supongo que sí *se ríe*

-Si fuese un demonio terrorifico no te gustaría... y yo estoy feliz así-sonríe y le besa de nuevo

(Hasta mañana, descansa ^_^)

*Le devuelve el beso*
- No, no me gustarías... Pero así sí que me gustas *se ríe y vuelve a besarle*

[Buenas noches! ^^]

-Debo ser el demonio más adorable de todos-se ríe suavemente

*Se ríe*
- Probablemente.

-¿Y no merezco unos mimitos por eso?-sonríe

*Se ríe*
- Puede que sí.

-Yo creo que sí y además en grades dosis-se ríe y le besa

*Le devuelve el beso y se ríe*
- ¿Y cómo quieres que te mime?

-Te dejo que lo decidas tú, mi dulce Kei-sonríe y le besa nuevamente

*Le devuelve el beso y sonríe*
- Pues no sé...

-¿No se te ocurre nada?-le vuelve a besar